Muestra tu valor
A lo largo de mi trayectoria profesional, me han preguntado muchas veces cómo hacer una vídeo-presentación o un vídeo-currículum. Para un cliente o seleccionador resulta clave poder valorar lo que sabes hacer en 1 minuto. Recientemente, leía un artículo de CNN Expansión que decía que el 90% de los empleadores se sentirán atraídos por un historial en ese formato, según una encuesta. Hoy ya no existe diferencia entre venderse como empresa o como candidato.
En este post voy a dar algunas claves para hacerlo:
1. Huye de lo clásico y no cuentes tu cv. Analiza tu sector y contrasta. Puedes encontrar muchos ejemplos y muy buenos de cómo hacer un vídeo currículum o una presentación de tu empresa. ¿Qué te ha gustado? ¿Qué te llama la atención? ¿Por qué es diferente? Apunta los puntos fuertes e intenta aplicarlo en el tuyo de forma personal.
2. Da una prueba de lo que eres capaz. Muestra qué has conseguido y qué puedes llegar a hacer. No se trata de leer tu cv, se trata de aportar soluciones y generar valor diferencial.
3. Prepara un guión. El esquema es el mismo que prepararías para hacer una conferencia de impacto o una presentación original. Plantéate cuál es tu objetivo, a quién va dirigido, a qué sector, a qué empresa, a qué personas, qué ofreces, en qué eres bueno y qué te hace especial. Recuerda que tienes pocos segundos para conquistar al entrevistador y conseguir despertar la curiosidad por ti.
- Preséntate. Quién eres.
- Las conclusiones al principio. Qué valor vas a aportar. De qué eres capaz.
- Trabaja tu marca personal. Por qué eres diferente del resto.
- Cuál es tu objetivo.
- Realiza un buen cierre. No te olvides de facilitar tus datos de contacto y de dar las gracias a tu público.
4. Ensaya. Muéstrate natural. Deja que otros vean tu vídeo y así conseguirás feedback. Asesórate por un experto en comunicación o en RRHH.
5. Cuida los detalles. Piensa cuál va a ser tu escenario, piensa en el vestuario, cuida la luz y el audio, etc.
Por último, dale un toque diferencial. Aquí verás algunos casos de éxito.
«La mayor virtud de un marinero es una saludable incertidumbre.» Joseph Conrad.